Luego del show, Keroglian compartió sus reflexiones en una entrevista con TD9, brindando una visión profunda y matizada sobre su carrera y el estado actual del humor y el carnaval en Uruguay. Keroglian describió su experiencia actuando en los teatros más prestigiosos de su país como algo “increíble y totalmente inimaginable”. Según él, la oportunidad de actuar en estos escenarios y conocer a un público diverso que acude a verlo y disfrutar de sus presentaciones es “realmente muy lindo”. Además, destacó la diversidad del público uruguayo, mencionando cómo en diferentes ciudades la gente reacciona de manera distinta: algunos participan más cantando, mientras que otros prefieren reírse. “Cada ciudad es diferente. Si bien somos todos uruguayos y parecemos iguales, no lo somos”, afirmó el artista, subrayando que esas diferencias enriquecen su experiencia y aprendizaje. El comediante también abordó los desafíos particulares que enfrenta el humor en la actualidad. Según Keroglian, las nuevas tendencias y sensibilidades pueden complicar la tarea de hacer humor. “Muchas veces se piensa que hacer humor hoy en día es más difícil debido a que puedes tener problemas por ciertas temáticas, ya sea porque alguien te critique o porque el público ya no se ría de eso”, explicó. Sin embargo, Keroglian sostiene que nunca ha sentido la necesidad de autocensurarse. “Jamás quise ir por ese lado del humor, así que digo lo que quiero y nunca he tenido problemas. No me censuro; mi límite es mi propia ética”, comentó. Para Keroglian, el humor uruguayo tiene una identidad particular, en la que la autocrítica juega un papel central. “Me gusta reírme de mí mismo primero. Si no te ríes de vos mismo, es difícil hacer reír a los demás”, señaló. En cuanto al futuro del carnaval, Keroglian expresó que esta festividad ha sido siempre una parte esencial de su vida. No obstante, reveló que el año pasado decidió no participar ni escribir para ningún conjunto, y planea hacer lo mismo este año. “Voy a estar del otro lado, como un espectador. Iré al teatro todos los días, pero no participaré activamente”, comentó. Al hablar de los nuevos exponentes del carnaval, Keroglian elogió el talento de los actuales cantores, guionistas y actores. “Cada vez es más profesional, se trabaja más el detalle y hay más espectáculos. Sin embargo, lo que falta es que el carnaval sea políticamente incorrecto”, afirmó. Para él, el carnaval ha perdido un poco de su esencia al volverse demasiado correcto políticamente, algo que considera fundamental para su autenticidad y vitalidad.
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